sábado, 7 de junio de 2014

ALGO DE HISTORIA DEL SÍNDROME DE PIERNAS INQUIETAS


 El síndrome de piernas inquietas (SPI) no se ha descubierto recientemente. Ya en el siglo XVII, más exactamente en el año 1672, un médico llamado Thomas Willis, ya lo describía en su libro: “Algunas personas,cuando están cayendo en el sueño, notan en los brazos y en las piernas como sacudidas y contracciones de los tendones y , así sienten una gran intranquilidad y desasosiego de sus miembros y ya no pueden volver a dormirse, como si se les estuviese sometiendo a una gran tortura”.

Ya en el año 1861 Whitmaack la llamó “ansiedad de la tibia”. Este autor estaba profundamente equivocado ya que la asoció a “personas histéricas”.

No fue hasta la segunda década del siglo XX, cuando Oppenheim en 1923 definió a la enfermedad como una alteración neurológica y fue el primero que reconoció el componente genético y hereditario de la enfermedad.

Ya en 1945 un neurólogo americano, Ekbom, describió todo el espectro clínico del síndrome y fue el primero que la clasificó en dos formas. Una forma en la que predomina una sensación anormal y espontánea (sin que haya ningún contacto) en las piernas, que se llama parestesia  y la denominó “astenia crorum parestésica”. En una segunda forma el paciente siente verdadero dolor  y que la llamó “astenia crorum dolorosa”.


En los últmos años se ha demostrado que tienen un papel muy importante en esta enfermedad el metabolismo alterado del hierro en unas determinadas áreas del cerebro. Estas áreas del cerebro serían los gánglios basales (que son un grupo de neuronas localizados dentro del cerebro y que juegan un papel importante en el control del movimiento). Uno de estos gánglios basales es la sustancia negra cuya alteración va a producir la enfermedad de Parkinson. Así se ha observado que el síndrome de piernas inquietas es mucho más frecuente en pacientes con enfermedad de Parkinson. Además fármacos utilizados para tratar a estos enfermos también van a mejorar los síntomas del síndrome de piernas inquietas

Thomas Willis


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